SOBRE EL AUTOR

lunes, 24 de enero de 2011

Cartas a un joven poeta

“Usted pregunta si sus versos son buenos. Me lo pregunta a mí. Y antes lo ha preguntado a otros. Los envía a algunas revistas. Los compara con otros y se inquieta si determinadas redacciones rechazan sus ensayos. Ahora bien (dado que usted me ha permitido aconsejarle), yo le ruego que abandone todo. Usted mira hacia afuera y esto sobre todo no lo debiera hacer ahora. Nadie puede aconsejarlo ni ayudarlo, nadie. No hay más que un único medio. Vuélvase usted en sí mismo. Indague la razón que lo hace escribir; examine si extiende sus raíces en el lugar más profundo e su corazón, confiese a sí mismo, si tendría que morir al serle negado escribir. Esto sobre todo: en la hora más queda de su noche, pregúntese: ¿Debo escribir? Cave en sí mismo en demanda de una honda respuesta. Y si ésta debiera rezar afirmativamente, si puede enfrentar esta seria pregunta con un firme y sencillo “Debo”, entonces construya su vida de acuerdo con esta necesidad; su vida, hondamente, hasta en su hora más indiferente y menguada, ha de convertirse en signo y testimonio de este apremio.” Rainer María Rilke.